miércoles, 27 de abril de 2011

100 GRACIAS


¡Gracias!

Para alguien, como yo, que valora la Amistad por encima de ¡tantas cosas! (de casi todo lo que podemos encontrar en la vida), descubrir que hay 100 personas que, además de asomarse a mi blog, han querido dejar su reconocimiento amigo y así engrosar la lista de "seguidores", no sólo es motivo de alegría, sino también de agradecimiento.

Gracias, pues a Luis, quien ha sumado su cuota para llegar al 100. Pero también a Charo, a Blanca, a Gabriel, a Guille, a Laura, Carmen, Daniel, Jordi, Letik, Nuria, Araceli, Ana, Guimel, las María, Citu, Arice, Eliane, Sú, Dave, Até, etc. etc.

Un blog es algo que nos abre a la comunicación con otras personas. Su razón de ser es establecer relaciones, hasta lazos...

Ojalá que sepa yo ofrecer, siempre, cosas que os resulten valiosas.

100 abrazos,
                            José-María



Seguimos ¡en contacto!


sábado, 23 de abril de 2011

... PORQUE ES PASCUA

         VIDA FLORIDA



           Siéntela.
           La Vida está... aquí.


           En ti, en mí,
           en quienes nos acompañan
           en esta andadura
           de ser y estar... 
                                             y en todo
                                             lo que nos rodea.


          Date cuenta,  percibe
          con todos tus sentidos, 
                                                    que lo Nuevo
                                                    ha triunfado
                                                    sobre lo caduco y viejo.


             Que la Vida ¡ha florecido!
             con todos
             sus colores y energía.


                      Siéntela: atrévete
                      a creer en ella y a sentirla;
                      no sólo pensar
                      que debe ser...;


          no sólo razonar diciéndote
          que todo apunta a deducir
          y concluir que la vida
          rompe los surcos de la tierra
          para salir ¡de nuevo!,


                                   ¡florecida! cada vez...;
                                   no sólo porque
                                   quieres creerlo, a pesar
                                   de todos los pesares
                                   que, a veces (tantas veces)
                                   parecen muchos.    


           No hay más evidencia
                                                    que la evidencia.


           Pero no hay quien pueda
           ocultarla ni evitarla:
                                                    la Vida está aquí.


                     ¡Es la Pascua florida!


                                                                  José-María Fedriani

domingo, 17 de abril de 2011

ORACION PARA LA SEMANA SANTA


ORACIÓN DESGARRADA
ANTE EL PADECER
DE TANTOS CRISTOS

Señor, 
te vemos padecer...
y no decimos nada,
no hacemos nada,
no respondemos a tu llamada,
no nos comprometemos
con acciones solidarias
para evitar que siga sucediendo
este crimen impune que, entre todos,
estamos cometiendo:

Te vemos padecer
cuando nos hablas, diciéndonos
las mayores verdades
que nadie ha dicho nunca
y Tú
estás dándote cuenta
que apenas atendemos,
que no nos enteramos de nada,
acaso que no te escuchamos...

Te vemos padecer, hoy,
cada vez que alguien
dice verdades y esas palabras,
esas “buenas noticias”
o esas denuncias,
son acalladas, manipuladas,
tergiversadas... ¡porque
no interesa la verdad!

Te vemos padecer
cuando vas viendo
que, después de desvivirte por la gente,
siempre, permanentemente...,
hay quienes conspiran contra Ti...
y tienes que huir
y tienes que esconderte...

Te vemos padecer, hoy,
cuantas veces...
hay personas solidarias
que no son comprendidas,
que son malinterpretadas,
que se les echa de los sitios
porque estorban...

Te vemos padecer
cuando nos quieres enseñar
que es amando
como se pueden resolver verdaderamente
los problemas, los conflictos;
cuando te empeñas en decirnos,
con gestos y palabras,
que la vida es servicio, es humildad,
es entrega...
y nosotros seguimos distraídos...

Te vemos padecer, hoy,
en cuanta gente es obligada
a hacer los trabajos más serviles
que nadie quiere hacer,
y también tantas tareas no reconocidas,
de mujeres y hombres
que hacen posible
que la vida sea “cotidiana”, cada día.

Te vemos padecer
al pensar que nos dejas
la gran Misión
de hacer crecer el Amor
hasta los confines de la Tierra...
y tenemos miedo
y nos sentimos perdidos...

Te vemos padecer, hoy,
cuando vemos la injusticia
que maltrata estructuralmente
a un medio mundo, al Sur,
llevando a tanta pobre gente
a morir de hambre y desnutrición
por causa del egoísmo humano.

Te vemos padecer
haciéndonos la ofrenda
de tu vida, tan temprano,
dándonosla antes... de que fuera tarde...;
porque veías que te la iban a quitar,
y Tú querías demostrarnos
que todo pan,
que todo vino,
que todas las cosas...
han de ser compartidas;
y también que vivir enteramente
es aceptar la muerte que nos llega
con libertad,
con esperanza,
con amor totalmente entregado.

Te vemos padecer, hoy,
cuando el egoísmo indiferente
lleva a la gente
a vivir “sin contar con nadie”,
sin pensar en nadie,
a vivir “pasando” y haciendo ”oídos sordos”
a tanta gente sola,
a tanto desahuciado,
a tanta incomprensión y desesperanza
de jóvenes, de ancianos, de niñas y niños,
de enfermos y olvidados,
de amas de casa,
de obreros castigados,
de emigrantes,
de gentes sin futuro...

Te vemos padecer
sintiendo la tristeza mortal
de la agonía
de tus últimas horas...,
viendo venir la traición,
percibiendo el abandono,
la falta de apoyo
de quienes tenías más cerca,
pero se dejaron dormir.

Te vemos padecer, hoy,
en tantas situaciones de agonía
y de desesperación terrible,
de quienes no tienen
más armas que las lágrimas;
en medio de tantas traiciones,
negocios sucios,
pasotismos, cobardías...

Te vemos padecer
al ser aprehendido
y enjuiciado
en medio de una total conspiración,
utilizando falsos testigos,
manipulando el proceso,
llevándote a ser condenado
por el manifiesto interés de unos cuantos.

Te vemos padecer, hoy,
cuando por la crueldad y la injusticia
de tantos poderes, más o menos ocultos,
se condena, sin derecho a defenderse,
a todos quienes se enfrentan
y no se dejan arrastrar...
por el “sistema establecido”
por los “dueños” del poder y los dineros...
que pretenden ser “amos del mundo”
aunque para ello
haya quienes llevan la muerte a toda vida;
incluso a los ríos, los bosques
y hasta al aire...

Te vemos padecer
siendo sujeto maltratado
en todos los sentidos:
latigazos, escupitajos, burlas,
heridas de espinas
y heridas de abandonos y negaciones.
Nadie te apoya,
nadie te tiende una mano...

Te vemos padecer, hoy,
en situaciones tan parecidas...
¡de ese medio mundo!,
de esa paciente humanidad
de millones de criaturas
cruelmente maltratadas,
tantas veces, diariamente,
y condenadas a sufrir
para que unos pocos disfruten
de todo lo que se les antoje...,
porque otros preferimos “no meternos en líos”
y, cobardemente, los dejamos...

Te vemos padecer
cargando con la cruz,
que te hace caer una y otra vez:
¡es demasiada carga
para un ser  humano
tan maltratado,
tan llevado al extremo de la vida!
¡No es posible,
no puede darse más crueldad!.

Y te vemos padecer,
como si nada.
No intervenimos, huimos... casi todos.
Es tu hora de ascenso
hasta el Calvario.

Te vemos padecer, hoy,
también hoy cargas con la cruz;
esa cruz que
se convierte... en un recuerdo
que puede ser “muy peligroso”,
pues nos llama
a la solidaridad con los oprimidos.

¿Quién va a echar, ahora,
una mano?
¡Ya no puedes cargar con tanto peso!

Te vemos padecer:
ahora Tú estás desnudo,
junto a la cruz
desnuda.
Y eres clavado en la cruz
y así la llenas de sentido: 
Eres el Cristo
que das la vida,
que te desvives de Amor
¡por todo el mundo!.

Te vemos padecer, hoy,
Señor
y nos quedamos...
callados,
como esperando que Tú hagas,
que sigas redimiendo...
a la esta Humanidad; 
pues no llegamos a meter
en nuestras vidas
el Mensaje de tu vida,
del todo Amor
que llega a poner
¡Vida en la muerte!.

Amén.  


                                José-María Fedriani

  

viernes, 15 de abril de 2011

ALGUNAS DEMOCRATICAS OPINIONES...

EL COMPROMISO DEMOCRATICO


       
Si difícil es hablar de ciertos temas ante una audiencia, sin saber como piensa (sobre devociones o creencias religiosas, sobre sexo, sobre política o fútbol...); pues aún más difícil es escribirlo, pienso. Pero me voy a arriesgar, pues creo que ello también es una manera de ser demócrata.

El compromiso democrático no puede reducirse a ir a votar... cuando nos toque hacerlo. A veces, quizá demasiadas veces, esto es dejadez. Sí, porque si, con nuestros votos, hacemos que unas personas lleguen a tomar las riendas de nuestro país, eso nos implica... No es lo mismo “dejar” que sean unos u otros quienes decidan tantas (quizá demasiadas) cosas para los próximos años.

Por eso, pienso que no debemos seguir votando a quienes ya nos han defraudado ¡demasiadas veces!..., aunque ellas y ellos sean la fuerza política que más votos resta a “esos otros” que no queremos, por nada del mundo, que vayan a conseguir la mayoría...

Esta tierra nuestra no es, ni puede ni debe serlo, bi-partidista. Pero ¡si tenemos una riqueza mental tan grande que, en cada casa, tenemos tantas visiones de la realidad como personas somos!  ¿Y por qué no?

Además, eso de las mayorías absolutas, ya hemos comprobado que tampoco es nada bueno... ¡para nadie! (bueno, a acepción de quienes la consiguen, que ya sabemos todo el poder que les otorga).

A la hora de plantearnos nuestro voto (o boto), todo puede ser válido. Y me parece que tan democrático es ir a votar conscientemente como el negarnos a ir. Se puede “cumplir” yendo a “botar” nuestra papeleta, sin pensar lo que hacemos; como se puede ir a emitir (a través de esa papeleta) un apoyo a una candidatura, o una opinión, o hasta una protesta... Todo tiene, debe tener su lectura. Y los analistas deben saber entender que es importante leer tanto el grado de abstenciones o de votos en blanco, como la edad de la mayoría de personas que vota  ¿no es cierto?  

Yo, que nunca he militado en ningún partido político pero considero que sí he estado, muchas veces, comprometido con la democracia de a pié,  invito a todas y a todos que meditemos nuestro voto... y si no nos gusta ninguna lista (aunque hay suficientes posibilidades para que alguna nos parezca medio válida), pues comprometámonos con NO votarles. Aún nos quedan las opciones de “no votar” (que no es lo mismo que “pasar” de ir) y la de “votar en blanco” (sobre vacío), que también es un VOTO  muy democrático.


                                                                  José-María Fedriani
 


domingo, 10 de abril de 2011

BUENAS YERBAS


QUÉ PLANTAS UTILIZAR PARA: 

Acetona: Vara de oro.

Acné: Aloe vera.

Anemia: Cardo santo.

Arterioesclerosis: Alcachofera, Espino blanco, Muérdago.

Asma: Ajo, Cardo mariano, Cardo santo, Énula campana, Hinojo, Melisa, Onagra.

Aumentar la secreción láctea: Albahaca, Anís verde, Comino, Eneldo, Hinojo, Liquen de Islandia.

Bazo: Grama.

Cabello, uñas y piel: Alga Hijiki, Alga Nori, Bardana, Capuchina, Dulcamara, Fumaria, Judía, Licopodio, Malva, Nogal, Onagra, Ortiga, Pensamiento, Salvia, Verbena, Verónica, Zarzaparrilla.

Calambres: Melisa.

Cálculos renales: Abeto, Arenaria, Enebro, Gatuña, Gayuba, Judía, Malvavisco, Matagallo, Mijo del sol, Parietaria, Pino, Rompepiedras.

Ciática: Judía, Lepidio.

Cicatrices: Aloe vera.

Circulación: Ajo, Alga Arame, Alga Kombu, Castaño de Indias, Corazoncillo, Espino blanco, Ginkgo, Levístico, Milenrama, Muérdago, Ruda, Rusco, Salvia, Té Mu, Tomillo.

Colesterol: Alcachofera, Harpagofito, Onagra.

Cólicos: Anís verde, Comino, Hierba luisa.

Cuperosis: Rusco.

Delgadez: Alholva-Fenogreco.

Depresión: Angélica, Avena, Corazoncillo, Ginseng, Nuez de Kola, Pasiflora, Romero.

Depurar: Abedul, Agracejo, Ajo, Aloe vera, Bardana, Pensamiento, Saponaria.

Deshabituación tabaco y drogas: Avena.

Diabetes: Alcachofera, Arándano-Mirtilo, Judía, Ortiga, Salvia, Travalera, Vara de oro.

Diarreas: Avellano, Bistorta, Malva, Ortiga, Salicaria, Salvia, Tormentila.

Digestión: Achicoria, Agracejo, Ajedrea, Ajo, Aloe vera, Angélica, Anís verde, Anís estrellado, Boldo, Cálamo aromático, Corazoncillo, Correhuela, Hierba luisa, Hierbabuena, Hinojo, Liquen de Islandia, Lúpulo, Té Kukicha, Verónica.

Disminuir apetito: Alga Agar-Agar.

Dolores: Amapola, Harpagofito, Sauce.

Dolores de cabeza: Ginkgo, Matricaria, Cardo mariano, Espliego, Manzanilla, Muérdago, Nuez de Kola, Salvia.

Eliminar líquido: Abedul, Adonis, Agracejo, Alcaravea, Apio, Arenaria, Bardana, Boldo, Borraja, Brezo, Cerezo, Coclearia, Cola de caballo, Diente de león, Enebro, Énula campana, Fumaria, Gatuña, Grama, Judía, Lepidio, Levístico, Maíz, Malvavisco, Marrubio, Ortiga, Retama, Sanguinaria, Saúco, Té Mu, Ulmaria, Vara de oro, Zarzaparrilla.

Embarazos: Alga Hijiki, Melisa.

Encías: Bistorta, Malvavisco, Saúco.

Enfermedades de la matriz: Anís estrellado, Matricaria, Bistorta, Comino, Hiedra terrestre, Malva, Milenrama, Nogal, Ortiga, Ortiga blanca, Roble, Salvia, Té Mu.

Escorbuto: Alfalfa, Capuchina, Celidonia menor, Erísimo, Lepidio.

Estimular apetito: Agracejo, Agrimonia, Ajenjo, Ajo, Alcaravea, Alholva-Fenogreco, Angélica, Cardo santo, Comino, Genciana, Liquen de Islandia, Lúpulo, Trébol de agua.

Estimular corazón: Adonis, Espino blanco, Levístico, Melisa, Nuez de Kola.

Estimular las defensas: Aloe vera, Echinacea.

Estimular producción hormonal: Alga Wakame, Ginseng, Onagra.

Estómago: Aloe vera, Anís estrellado, Cáscara sagrada, Centaura menor, Cola de caballo, Comino, Culantro, Eneldo, Hiedra terrestre, Laurel, Lepidio, Lino, Malva, Manzanilla, Mejorana, Melisa, Menta, Milenrama, Orégano, Poleo, Rabo de gato, Regaliz, Salvia, Tilo, Trébol de agua.

Estreñimiento: Achicoria, Alga Agar-Agar, Aloe vera, Cáscara sagrada, Centaura menor, Frángula, Fresno, Lino, Malvavisco, Sen, Zaragatona.

Estrías: Aloe vera.

Fiebre: Cardo santo, Marrubio, Olivo, Salvia, Sauce.

Fiebre del heno: Cardo mariano, Manzanilla, Pino marítimo.

Fiebre puerperal: Matricaria.

Flebitis: Castaño de Indias, Ginkgo, Hamamelis, Meliloto.

Garganta: Bistorta, Drosera, Erísimo, Hiedra terrestre, Hinojo, Lino, Malva, Malvavisco, Nogal, Saúco, Serpol.

Gases: Albahaca, Alcaravea, Anís verde, Anís estrellado, Arándano-Mirtilo, Boldo, Centaura menor, Comino, Culantro, Eneldo, Frángula, Hinojo, Laurel, Menta, Poleo.

Golpes: Árnica, Caléndula, Primavera.

Gota: Alcachofera, Alga Fucus, Coclearia, Cola de caballo, Enebro, Fresno, Genciana, Harpagofito, Matricaria, Judía, Licopodio, Milenrama, Rusco, Salvia, Zarzaparrilla.

Gusanos intestinales: Ajenjo, Ajo, Arándano-Mirtilo, Escaramujo, Granado, Tomillo.

Hemorragias: Bistorta, Bolsa de pastor, Cola de caballo, Hamamelis, Llantén, Ortiga, Salvia.

Hemorroides: Aloe vera, Castaño de Indias, Celidonia menor, Ciprés, Cola de caballo, Encina, Hamamelis, Lino, Manzanilla, Meliloto, Milenrama, Ortiga, Roble, Rusco, Sanguinaria, Tormentila.

Heridas y llagas: Cantueso, Consuelda, Corazoncillo, Echinacea, Hiedra, Milenrama, Nogal, Perejil, Rabo de gato, Romero, Salvia, Sanguinaria.

Hígado: Alcachofera, Alga Wakame, Apio, Bardana, Boldo, Cardo santo, Cáscara sagrada, Correhuela, Diente de león, Fumaria, Grama, Hierba luisa, Menta, Mijo del Sol, Romero, Vara de oro, Verbena.

Incontinencia de orina: Corazoncillo, Gayuba, Vara de oro.

Infartos glandulares: Alga Fucus.

Infecciones: Echinacea, Manzanilla, Marrubio, Serpol, Tomillo.

Inflamaciones: Echinacea, Harpagofito, Lino, Zaragatona.

Insomnio: Amapola, Lúpulo, Melisa, Pasiflora, Valeriana.

Intestinos: Anís verde, Anís estrellado, Avena, Centaura menor, Comino, Culantro, Dulcamara, Frángula, Lino, Malva, Manzanilla, Melisa, Serpol, Verónica.

Manchas de la piel: Aloe vera, Saúco.

Mareos: Ginkgo, Melisa, Menta, Muérdago.

Menopausia: Espino blanco, Onagra, Salvia.

Menstruación, aumentar: Aloe vera, Bolsa de Pastor, Ruda.

Menstruación, provocar: Ajenjo, Caléndula, Laurel, Mejorana, Perejil, Ruda.

Menstruación, regular: Anís verde, Bolsa de Pastor, Cola de caballo, Culantrillo, Hierba luisa, Levístico, Lúpulo, Manzanilla, Onagra, Perejil, Rusco, Salvia.

Nervios: Apio, Avena, Azahar, Corazoncillo, Espino blanco, Espliego, Hierba luisa, Hisopo, Jara, Lúpulo, Melisa, Menta, Matricaria, Naranjo, Onagra, Pasiflora, Salvia, Té Mu, Tilo, Tomillo, Valeriana.

Obesidad: Alga Fucus, Té verde.

Ojos: Aciano, Caléndula, Eufrasia, Hamamelis, Manzanilla, Meliloto, Nogal, Rosa, Saúco, Té negro.

Paperas: Alga Fucus.

Parkinson: Onagra.

Picaduras de insectos: Perejil.

Pie de atleta: Aloe vera.

Piedras en el riñón (Litiasis renal): Arenaria, Rompepiedras.

Pies: Nogal, Ortiga blanca.

Próstata: Gayuba, Orquídea, Vara de oro.

Provocar contracciones uterinas: Aloe vera, Matricaria, Comino.

Psoriasis: Aloe vera, Calaguala.

Purgarse: Aloe vera, Correhuela, Retama, Sen.

Quemaduras: Aloe vera, Corazoncillo, Menta.

Regenerar la sangre: Alga Wakame, Coclearia, Diente de león, Fumaria, Llantén, Marrubio, Sanguinaria, Té Mu, Vara de oro, Verbena, Zarzaparrilla.

Repeler insectos: Poleo, Tomillo.

Reponer minerales: Agracejo, Alga Agar-Agar, Alga Arame, Alga Fucus, Cola de caballo.

Reumatismo: Ajo, Apio, Dulcamara, Enebro, Fresno, Gatuña, Harpagofito, Milenrama, Onagra, Orquídea, Salvia, Sauce, Ulmaria.

Riñones: Alga Wakame, Apio, Arenaria, Coclearia, Cola de caballo, Enebro, Gatuña, Gayuba, Hierba luisa, Judía, Lepidio, Levístico, Licopodio, Maíz, Malva, Matagallo, Mijo del Sol, Milenrama, Muérdago, Orquídea, Parietaria, Vara de oro, Verbena.

Rubeola: Aloe vera.

Sabañones: Ginkgo, Nogal.

Sarampión: Aloe Vera.

Síndrome del túnel carpiano (Ver Receta).

Sistema linfático: Alga Fucus, Cardo santo, Echinacea.

Sudar: Bardana, Borraja, Cálamo aromático, Diente de león, Énula campana, Fumaria, Manzanilla, Mejorana, Pulmonaria, Saponaria, Saúco, Violeta, Zarzaparrilla.

Sudor excesivo: Encina, Nogal, Salvia.

Tensión alta: Ajo, Muérdago, Olivo, Onagra.

Tensión baja: Avellano, Cardo mariano, Ginseng, Nuez de Kola, Romero, Salvia, Tomillo.

Tifus: Marrubio.

Tos: Amapola, Capuchina, Culantrillo, Drosera, Erísimo, Eucalipto, Liquen de Islandia, Meliloto, Pensamiento, Salvia, Saúco, Tusílago, Violeta.

Tosferina: Drosera, Hinojo, Liquen de Islandia, Serpol.

Varicela: Aloe vera.

Varices: Castaño de Indias, Ginkgo, Hamamelis, Meliloto, Rusco.

Vejiga: Apio, Arenaria, Bistorta, Brezo, Gatuña, Gayuba, Licopodio, Lino, Maíz, Malva, Manzanilla, Vara de oro.

Verrugas: Ajo, Celidonia mayor.

Vías respiratorias: Abeto-Pino, Anís verde, Avena, Borraja, Coclearia, Culantrillo, Drosera, Dulcamara, Énula campana, Eucalipto, Gordolobo, Hiedra terrestre, Hinojo, Hisopo, Liquen de Islandia, Llantén, Malva, Malvavisco, Marrubio, Primavera, Pulmonaria, Regaliz, Té Mu, Tomillo, Verónica, Violeta.

Zumbidos de oídos: Ginkgo.




Nota: No olvidar nunca, que ante un problema de salud, se debe acudir al médico o al naturópata.