domingo, 27 de marzo de 2016

LA REALIDAD...

Ojalá

En la calle   
los coches corren.  
En la tele 
las chicas lucen  
sus ricas prendas.

Y en China 
las niñas mueren 
abandonadas 
tiradas al suelo
como papeles
rotos  
en medio de las calles 
¡la vida deshecha 
como una flor
cortada 
que nadie pone, 
siquiera, 
en un vaso de agua 
para que no se mustie 
en unas horas...

En la esquina 
un desolado inmigrante,   
bajo el peso del sol 
ofrece pañuelos 
y prensa diferente...

Los recursos del planeta
abundan, hasta hay
excedentes ¡de todo!
Pero la gente  
se muere 
¡a chorros! (¡muere
medio mundo!)
¡de hambre!

¿En nombre 
de que dios?
¡me cago en el demonio!
Y en las leyes   
malditas... que permiten
y promueven
y aplauden  
la muerte de inocentes.

¿Un barril de petróleo 
es, acaso, 
más valioso que la vida
de cualquier ser humano?

Yo me niego a aceptar
que una vida,
aún la del más olvidado
de los seres humanos,
aún la vida de algún indeseable
que se seca entre rejas...
valga menos
que un trocito de papel,
¡aunque sea un billete de quinientos!
  

La abuela del kiosco,  
vende y mastica  
chicles USA.
Y el buzón  
del vecino del quinto 
está que desborda  
publicidad...

Una indigente 
pide y suplica 
algunos céntimos  
en la puerta de una iglesia... 
mientras su hija, a un lado,
mal-vestida,
a cambio de nada,
ofrece una sonrisa
que enternece a quien la mira.

Las drogas, las armas,
la “trata” de inocentes víctimas 
para el porno-cine 
y los prostíbulos,...
y la venta engañosa 
por telefonía 
de trozos de Edén 
que incluyen una ración
de la rica tarta 
que hace Eva... de
las más dulces manzanas 
del paraíso...

La justicia y la paz
han de estar
por encima
de los “negocios” de los violentos.
Por encima de los ladrones
con chaqueta y corbata,
pero sin escrúpulos.
Por encima de las medallas
de los criminales vencedores...
digo, héroes de las guerras.  
La vida digna 
de todos los seres humanos  
ha de estar por encima.
La alimentación básica
para todos y cada uno
de estos seres humanos
tiene que estar
por encima. Por encima de todo.

La vida   
no es la misma...
¿o sí es la misma?
¿Para los ricos
que para los pobres?, 
¿para los varones que
para  las chicas?,  
¿para los turistas de Holanda,
de Suiza, de Alemania...
que para unos refugiados de algún país  
en guerra?, 
¿que los “sin papeles” que vienen
de cualquier país del Sur?.
Yo no lo entiendo. Me niego
a comprender lo incomprensible.
Así nomás. 


Yo hoy  suplico  
con este amargo dolor
sin lágrimas  
que tantos seres humanos
sin voz
ni nombre
tienen como único sabor en sus bocas
sedientas de justicia...
Yo suplico (repito)
por un Orden Nuevo
para el Mundo.
Un Mundo más humano
¡para toda criatura,
sin distinción
de raza, de credo,
de sexo o estatura!

Pero ¿por qué no?
¡¿Es que tanto nos duele ser personas?!

Las guerras... ¡siempre
son derrotas!.
Crueles son...  en Angola,
en Armenia, en Chechenia,
en Colombia, en Etiopía,
en Ruanda, en Zimbabwe...
Incluso en Irak.

¿Por qué a una guerra
se le llama preventiva?
¿Puede ser una guerra preventiva?
¡El aborto es preventivo  
de la vida!  
¡Es agresión   
a la vida! 
¿Quién castiga a esos
crímenes anónimos, escondidos
detrás de unas banderas?
¿quién justifica la sinrazón
de esta locura?

Empresarios-políticos que venden
sus almas y sus programas
al diablo,
por unos votos...
¡Oh, el poder!...!!!
¿Qué es el poder?
Poder... ¡hace cosas!.
Llegar a acuerdos y hacer
realidades
de los proyectos que son posibles...
¡Eso sí es política!
Poder impedir... que otros
hagan las cosas... Es
más que “oposición”...
¡eso es derrotismo,
eso es tiranía,
eso es, quizá,
“sucio negocio” sin escrúpulos.

La carrera de armamentos
¡el gran negocio!.
Esa si
que es una plaga... intolerable.
Es, acaso, la única;
desde luego, la más profunda
razón...  para las guerras.

Y parece que no hay remedio:
el anhelo más profundo,
el clamor más universal
queda acallado
por el egoísmo productivo
de unos pocos.  

Me da hasta miedo
decirlo.
Me da hasta pena pensarlo...
Este Mundo, nuestro mundo
que avanza ya...
por el Tercer Milenio
de la Historia de esta Era cristiana...,
en vez de estar
llena de convivencia ética
y armónica   
hasta los confines de la tierra...
está sembrada
de esclavos.
¿Es que no ha encontrado aún
la alegría de compartir
la vida entera,
en justicia,
en libertad,
en paz?

Mientras tanto, yo
repito:
“Bienaventurados
los que construyen la paz”.
Malditos
quienes la ahogan.

Ojalá
que detrás de esta noche,
que mañana
en la mañana... salga el sol
por el Este... e ilumine
con luz nueva 
a todos los Hijos de la Tierra.
Que este mundo que tenemos
es Patrimonio
y Herencia
de todos los humanos.
También de los cientos de críos
que, este rato, están muriendo...
sin el “pan nuestro”
que no tuvieron 
este día.

Ojalá que mañana
amanezca de verdad.
Y haya Paz  
y Justicia 
y Alegría...  
¡en todas partes!. 

Ojalá.

                       ("Ácido desoxirribonucleico")

sábado, 19 de marzo de 2016

FLORES AMARILLAS




Levanta la vista y mira;
que el campo está lleno entero
de innumerables flores amarillas.
Es signo inequívoco y certero
de que renace la vida.


 
 
 

 
Es ahora que llega el momento
para acoger con alegría
y abrir nuestros corazones,
al despertar de cada día,
con buenas y nuevas intenciones.


 
 
                     
 

 
Basta ya de mirar al suelo
y andar tristes los caminos,
pues la certera invitación del Cielo
está en buscar nuestro destino
haciendo feliz… ¡al mundo entero!


 
 
 

 




jueves, 10 de marzo de 2016

15 - M... y algo más.


 
Si queremos que la sociedad sea lo que tiene que ser, es necesario (muy necesario, hasta imprescindible) en movimiento ciudadano.

En un momento determinado de nuestra reciente historia, surgió la movida (fruto de la indignación) del 15 - M. Tenía que ser y fue.






Movimiento de indignación, que se organiza a raíz de la gran manifestación (convocada por diversos colectivos de la ciudadanía) el día 15 de mayo de 2011. Era una gran protesta en contra de la penosa realidad que padecía tanta gente y de la mala gestión política que sufríamos la mayoría de la ciudadanía.



 
Después de unos años de pensar democráticamente, tantos ciudadanos (mujeres y hombres) de a pié… ya estábamos hartos de esa manera “tan poco democrática” de hacer uso de la política y pretendiendo lograr todos los escaños necesarios para tener la libertad de actuar ejerciendo un cierto absolutismo o totalitarismo, o lo que es lo mismo: dictatorial-mente. Buscando los propios intereses, o los del partido y sus partidarios.



Hoy sabemos que hacer política no es (como se nos decía en nuestros libros de “Educación para el Espíritu Nacional”) el “arte de gobernar los pueblos”; sino que es una habilidad social: la de hacer realidad lo que es posible; siempre en bien del pueblo, buscando como ir atendiendo las necesidades de la ciudadanía, mejorando la vida en sociedad; lo que se dice: trabajar por el bien común.




Y, seguramente por esto, surge este movimiento en la calle: son miles y miles de personas las que más o menos organizadas, sin entrar en el juego de la política, guita ¡NO MÁS! dominio del poder en manos de los banqueros, de ciertas corporaciones e instituciones bien establecidas, del binomio PPSOE, que dejan a la ciudadanía sin posibilidades de participación real.   


Pero claro, la “clase política” se da cuenta de lo que está pasando y… ¿qué hacer?, ¿resistir?, ¿atacar a lo nuevo que está naciendo? O, ¿por qué no…, aprovechar la ocasión (no tan calva) para “sacar partido” de este juego?


Así a partir alguna gente que ya estaba metida en el mundo de la política (más de oposición, más de izquierdas y con pocas posibilidades reales de lograr muchas cuotas de poder) vio una interesante “oportunidad” para “recopilar” bastante fuerza activa de toda esa marea de gente descontenta e indignada y llevarla a su “campo de batalla” político. Y, de ahí nació todo un “partido” político (Podemos) que no deja de ser la nueva izquierda (más o menos unida o reunida) actualizada, una especie de “fotocopia” de IU, pero con bastante tóner (tinta) e impresa en un papel nuevo… Quedando, digamos, mejorada su apariencia del original; pero siendo lo que era: una fuerza política un tanto comunista, anti-sistema neoliberal establecido, partidaria de la república, del laicismo, etc., etc. Pero que, como ya había pasado décadas atrás, no dejaba de ser “izquierda des-unida”, a pesar de lo que decía en sus siglas. Y demostrado queda cuando, a los chicos de Podemos les llega la tentación de convertirse en “casta” (¡qué tendrá el poder que tanto apega a los honorables sillones!), surge, de nuevo, la lucha por el poder, los enfrentamientos entre líderes, la división. Lo que para unos sí vale, a la hora de alcanzar el “poder”; para otros eso es contradecir (infidelidad) a las ideas, a los propios principios. Pareciera que hay quienes lo que buscan es “darle la vuelta a la tortilla” y llegar a ocupar las cotas de poder que antes tenían otros (esos que es necesario echar, para que dejen su sitio libre). Pero, para la mayoría del personal apuntadas al “movimiento anti orden establecido”, esto parece que se va convirtiendo en más de lo mismo. O, como diría en su día Julio Anguita “el reversos de la misma moneda”.

Y claro, ante la tentación mediática de “ser o no ser”, los unos quieren y pretenden conseguir sus “votos” y sus sillones…, mientras otras y otros siguen viendo claro que su papel ha de estar siempre (aunque sea en el “gallinero”) pero interpelando, cuestionando, opositando, declarando ¡indignación!

En su día (fascinante momento histórico), llegó la democracia. Con alianzas (no extremistas) y eurocomunismos (no tan comunistas como lo eran antes), fueron posible los ¡pactos democráticos!

Ahora, surge el gran dilema: ¿Cómo ser indignados pactando con los de siempre, con esa “casta” que desea mantener “casi todo” como siempre fue… (lo “bien atado”)?

Con buen discurso y hábil manejo de los símbolos, pero con poca “mano izquierda” para alcanzar las necesarias “aptitudes” para llegar al poder ¡el cambio, pedido por la calle, no es posible!

Haría falta aprehender a dialogar, llegar a saber respetar la opinión de quienes piensan y sienten de manera diferente… ¡empeñarnos en ser personas civilizadas!



 
Para mí que el 15 - M fue un clamor popular. Algo necesario y aplaudible; mientras que la manipulación que se hace de este movimiento para convertirlo en… aquello de lo que tanta gente estaba en contra, no deja de ser un “querer pero no poder” (quizás por no saber cómo hacer) para, como tantas veces, “decir” en voz alta lo que es falso y lo que, poco a poco, todo el mundo se va dando cuenta de que no es.

Me consta que ésta, mi “declaración” puede resultar provocadora para una parte de quienes me lee; pero… bueno, yo aquí invito a quienes lo deseen, a decir sus pareceres; que hablando, dialogando, opinando… ¡todos nos enriquecemos! Y eso sí que es algo en lo que todas y todos PODEMOS participar.
Gracias.