sábado, 5 de febrero de 2011

NUEVOS CONCEPTOS


HACIA UNA SOCIEDAD DIVERSA


La realidad es que marchamos... hacia una sociedad diversa.

Seguramente es que avanzamos hacia una “raza cósmica” que nos explicaba, hace años un antropólogo brasileño: todas la razas del mundo están llamadas a encontrarse-entrelazarse-mestizarse... Y, con ellas, con las razas, las diferentes maneras de ver y entender la realidad.

Está claro que avanzamos hacia una realidad globalizada. Podemos protestar, decir que no nos gusta eso de la globalización, que es algo que está movido por las grandes empresas multinacionales, etc. Pero... ¡esto no tiene vuelta de hoja!, una vez que hemos abierto las ventanas... ¡el aire fresco (o tórrido) ha entrado y ha invadido toda la casa!

Sí, irremediablemente, marchamos hacia una sociedad diversa y plural. Nos guste o nos moleste, esa es la realidad.

Y eso se traduce, cotidianamente,  en muchos y muy diversos aspectos: nuestros hijos e hijas se hacen amigos y amigas de personas muy muy “diferentes” de lo que nos imaginábamos...; incluso, alguna que otra vez, intimidan o hasta se llegan a emparejar con alguna persona de esas que, quizá, si nos la encontráramos por la calle, hasta le habríamos hecho un cerco para no topárnosla muy de cerca, “por si acaso”...

Y, si queremos “entrar” en la realidad que nos ha tocado vivir, y hacerlo éticamente, pues tenemos que “re-plantearnos” muchas cosas que, seguramente, hace unos años las teníamos muy claras y bien asentadas. Pero ¡hemos entrado en el siglo 21 con todos “sus flecos”!

Aunque a veces nos cueste, hasta nos duela, en nuestro planeta Tierra hay muchas y muy diversas culturas (creyentes y paganas)... y maneras de ver-sentir-vivir la realidad. Y como “las fronteras” van cayendo... pues, cada vez más, vamos en el mismo barco.

Como dice Pedro Casaldáliga: “El mundo es pluricultural, y debe serlo, para seguir siendo un mundo humano, y para que las diversas culturas de los diferentes pueblos continúen reflejando la imagen y semejanza de Dios con que van siendo creadas. Como cada persona es una imagen singular del Dios creador, cada pueblo es como una imagen colectiva de ese mismo Dios, que es comunidad trinitaria”.

Por eso, tenemos que abrirnos y adoptar una actitud de escucha receptiva y comprensiva de cómo la misma “realidad” es vista por otra gente...: cosas como ¿qué es una familia?, ¿una mujer y un hombre que deciden vivir juntos para siempre...?, ¿una comunidad de convivencia y amor recíproco?, ¿para siempre... o hasta que la convivencia deje de ser posible..., porque el amor se ha convertido en una larga lista de desencuentros y resentimientos?, o... ¿es un error de la naturaleza el sentir “de otra manera”, el querer vivir la sexualidad de un modo muy distinto a como yo me lo he planteado siempre?, ¿de verdad es un error de la naturaleza o, simplemente, es algo diferente, quizá minoritario...?

Sí, cada ser humano está en la vida porque el Padre-Dios lo ha querido ¿o no?... Y cada persona es “imagen y semejanza de Dios”, aunque se nos haya educado en que hay “imágenes” que mejor que no nos gusten... 

Seguiremos conversando.

Un abrazo, José-María

  









1 comentario:

  1. Válido razonamiento. Me parece muy acertado. Seguiré leyéndote. Un beso, ANA

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