viernes, 31 de agosto de 2012

ALGO ESTÁ PASANDO...


Estamos en 2012


Vivimos en la sociedad que niega, o no quiere ver, lo que está pasando. Lo evidente es escondido, obviado, disimulado… Parece que no interesa saber qué es lo que está pasando.

Quienes viven en una clase privilegiada, quienes ostentan el poder, quienes “manejan” los hilos de la economía ¡no quieren que nada cambie!, pues, evidentemente, no les interesa.

Pero, a pesar de todo (porque, además, no puede ser de otra manera), hay cosas que están cambiando. Situaciones que, por su propio peso, están cayendo… ¡y más que tienen que caer!

En un mundo injusto en el que la gran mayoría de la humanidad vive subsistiendo, en la pobreza, mientras sólo unas minorías viven bien (hasta en demasía), rodeados de lujo y confort frente a quienes no tienen techo, consumiendo opíparamente  lo que a tantos falta…

Y no basta con indignarnos. Es hora de actuar.

Debemos esforzarnos por cambiar la realidad mundial… Si nos ponemos de acuerdo, aunando confianza y solidaridad, toda la gente de buena voluntad ¡podemos cambiar el mundo!

Cada persona puede colaborar en promover desarrollos justos igualitarios, adoptando actitudes positivas y creativas.

Si nos hacemos conscientes de que el futuro de la humanidad depende de nuestro esfuerzo, seguro que no nos importará entregarnos para dar lo mejor: para darnos personalmente en pro de esta Causa.



PARALELAMENTE… LOS MAYAS NOS DEJARON UN IMPORTANTE MENSAJE:

Durante los últimos años se está hablado mucho sobre el mensaje que los mayas nos dejaron escrito en sus calendarios, muchas de estas fuentes lo han denominado como “las profecías del calendario maya del 2012”.

Un calendario que los mayas desarrollaron en base a las observaciones que realizaban sobre el espacio y las posiciones de ciertos planetas y estrellas, llegaron a construir observatorios astronómicos como el edificio llamado "caracol" que se encuentra en la ciudad de Chichen Itzá (México).


Según esto, el 22 DE DICIEMBRE DE 2012 el Sol recibirá un rayo sincronizador del centro de la galaxia con el que se iniciará un nuevo ciclo. Será el fin del mundo de materialismo y destrucción en que vivimos y el inicio de una nueva etapa de “respeto y armonía.”

Parece ser que los mayas ya sabían que todo esto iba a suceder; nos dejaron a los habitantes del planeta tierra un mensaje escrito en piedra: un mensaje con profecías de alerta y de esperanza.

El mensaje profetiza sobre lo que va a pasar en estos tiempos que vivimos; el mensaje habla sobre los cambios que debemos de realizar en nosotros mismos para impulsar la humanidad hacia la nueva era o el amanecer galáctico: un nuevo mundo sin caos ni destrucción.

Posiblemente, la civilización maya fue una de las más importantes de la historia. Hay vestigios históricos que existen desde los años 400 a. de C., si bien su real origen se remonta, de acuerdo a los propios mayas, a miles de años atrás, como sobrevivientes directos del cataclismo atlante. Entre el año 300 al 900 d. de C. se marca la culminación de su apogeo para los tiempos modernos. Tenían grandes conocimientos de astronomía y matemáticas, poseían un sistema de escritura jeroglífico y construyeron impresionantes edificaciones. Pero toda esta grandeza se vio reducida a la nada cuando, por causas desconocidas, las ciudades mayas fueron abandonadas e invadidas por la selva.

Los Sabios Mayas de Palenque (Chiapas, México) supieron algo al estudiar el cosmos y sus calendarios sagrados. Ellos tenían un mensaje para transmitir a las generaciones de este tiempo y dejaron señales a través de signos y jeroglíficos para que los descubriéramos.

Las creencias de los mayas se basaban en la idea de que el planeta Tierra se había destruido y creado varias veces, con cada nueva creación de un nuevo mundo los dioses mayas creaban nuevos seres humanos a partir de nuevos materiales, con cada creación los hombres se perfeccionaban y eran más avanzados, la última creación del mundo los dioses crearon al hombre a partir del maíz, se relata que la destrucción del anterior mundo fue provocado por un diluvio universal.

La primera creación del hombre fue a partir del fango y participaron un total de tres dioses mayas, la segunda creación del hombre fue a partir de la madera y participaron siete dioses, en la última creación del hombre un total de trece dioses mayas participaron creando el hombre a partir del maíz.

Los mayas creían firmemente que el tiempo no era lineal sino cíclico, es decir lo que ha ocurrido en el pasado ocurrirá en el futuro, y lo que sucederá en el futuro ya ha sucedido en el pasado.

Teniendo en cuenta el origen del mundo como el 11 de agosto de 3114 a .C., la fecha final del calendario maya corresponde al 22 de Diciembre del 2012.

A partir de estos hechos diversas fuentes de opinión concluyen que el 21 de Diciembre del 2012 los mayas predicen la destrucción de este mundo y el paso a uno nuevo.

La humanidad ya vivió varios ciclos antes del que nos encontramos actualmente. Uno de ellos sería el de la Atlántida, que concluyó con la desaparición de este continente. Su conocimiento fue a parar a Egipto y al golfo de México. Esto explicaría la cultura olmeca y el origen de sus conocimientos secretos. Hubo tres grandes ciclos más, correspondientes a otras grandes civilizaciones de la humanidad, que al igual que la Atlántida, también desaparecieron. Ahora otro gran ciclo estaría a punto de concluir.


A partir de aquí, hay quienes piensan que habrán cambios catastróficos para nuestro planeta; mientras también hay muchas opiniones que dice que lo que sucederá es que los humanos evolucionaremos hacia una nueva era. Porque los mayas no hablan del fin del mundo, es más, específicamente dicen que todo se transforma, que lo único que permanece es el espíritu, en su viaje de evolución hacia niveles superiores. La profecía maya más bien nos habla de cambios que ocurrirán a nivel físico en el planeta, y en la conciencia de la raza humana.

Las profecías mayas nos dice cosas importantes, como que las respuestas a todo están en el interior del hombre, que su comportamiento determina su futuro y afirma que la humanidad se encuentra en un momento de transición fundamental hacia una nueva manera de percibir el universo... que la tierra y el sistema solar están recibiendo un haz de luz, energía e información desde el centro de la galaxia, que está provocando un aumento en la vibración del planeta, de las ondas cerebrales y las células del hombre, que se están poniendo en resonancia, en equilibrio con la nueva frecuencia, ocasionando enormes cambios en su comportamiento.

Nos dice que la humanidad se dirige hacia una nueva época de armonía, que para llegar a ella tenemos que enfrentar nuestros grandes miedos y aceptar que las situaciones difíciles, que vivimos para aprender, conservando la paz en cualquier situación que vivamos, por difícil que sea, pues podremos mantener y aumentar nuestra energía interna produciendo un estado de vibración alta y un estado de respeto por todo lo que existe.

Ha llegado la hora de tomar conciencia de nuestra influencia en el planeta para no seguir equivocándonos, provocando su destrucción, como ha sucedido a lo largo de la historia...

Los hombres deben terminar con su conducta depredadora para sincronizarse con los ritmos de la naturaleza y ajustarse a los cambios que llevarán a todo el universo a una era de armonía.

Los sistemas basados en el miedo, sobre los que está fundamentada toda nuestra civilización, se transformarán simultáneamente con el planeta y el hombre para dar paso a una nueva realidad de más libertad y de profundo respeto de los unos por los otros, y en el reconocimiento de que todo lo que existe es como otra parte de cada uno.

A partir del año 2012, todas las relaciones estarán basadas en la tolerancia y la flexibilidad, pues el hombre sentirá a los otros, parte de un único organismo gigantesco.

Las sociedades se organizarán de otra manera, incluso dejando de utilizarse el dinero como medio de intercambio; surgiendo un camino espiritual común para toda la humanidad. La nueva época de luz y de armonía universal no tendrá ya una humanidad basada en la economía militar de imposición de verdades por la fuerza, ni en un sistema no equitativo de distribución de la riqueza representado en el dinero, la riqueza virtual y la especulación financiera.

¿Cómo vamos a colaborar en estos cambios tan necesarios para llegar a una realidad universal más justa, igualitaria y solidaria?

El mundo va a cambiar… ¿dónde nos situamos personalmente?, ¿qué vamos a aportar?

¿Con qué actitud, con miedo o con alegría y esperanza?


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