jueves, 17 de julio de 2014

OJALÁ QUE VUELVAN SIEMPRE


Golondrinas

La golondrina común (Hirundo rustica) es una de las aves más conocidas popularmente, seguramente por su proximidad a los seres humanos.

Mi infancia está llena de recuerdos en torno a las golondrinas. El patio de casa de mi abuela tenía una parte cubierta con vigas y cornisas… Era un espacio ideal para ellas y cada año, al llegar San José, como diría mi abuela, aquel patio se llenaba de sus típicos gorjeos «tsuit-tsuit-tsuit» y pareciera que decían ¡ya llegan las vacaciones, ya mismo está aquí el verano y será el tiempo de tomar ricos helados…!!!


Y eran ¡tantas! que en aquella casa de la Calle Porvenir, la misma en que yo nací, no hizo falta más música relajante para echarse una buena siesta.

Pero, luego, acabándose el verano pareciera que enteradas de que había que volver a sacar los libros para ir al colegio… se marchaban, camino de África.


Este verano, en unos días que he pasado en un medio entre el mar y la montaña, he tenido en un hueco de la escalera por la que subía a nuestro apartamento ¡un nido de golondrinas! que, cada día, además de que me trasladaban a mi infancia y primera juventud, me hacían pensar en que ¡todavía hay esperanzas de que nuestro loco mundo no acabe con la vida natural!

Las golondrinas han sido muy observadas y estudiadas por el hombre y han sido claves para desentrañar aspectos de la migración, de la selección sexual y de la reproducción en las aves.


De todos modos, a pesar de su abundancia, actualmente se considera una especie amenazada, por culpa de los cambios en el medio rural (referente a las políticas y técnicas agrarias) y porque en nuestras ciudades apenas contemplan cornisas ni hay barro; además de que con los insecticidas se las priva de alimentación.


Por eso es que, para concienciar a la población de su importancia y de la situación en que se encuentran, la organización SEO BIRDLIFE ha nombrado a la golondrina común como Ave del Año.

Sí, aplaudimos su idea: queremos un mundo lleno de vida. Un mundo… ¡con golondrinas!



       

2 comentarios:

  1. Muy interesante tu entrada.Y ojalá que vuelvan siempre!!! Y que cada vez haya más personas conscientes de cuidar este nuestro mundo y todo lo que habita en él.
    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  2. También para mí significa mucho. Me evoca a la niñez además de que siempre me gustó admirar su vuelo, me preguntaba por qué no se posaba en el suelo como otros pájaros. ¡Enhorabuena por acercarnos a una criatura tan especial!
    Saludos amigo,

    ResponderEliminar