Vistas de página en total

jueves, 18 de julio de 2019

CONFESIÓN SECULAR



       EN  LA  DIRECCIÓN             ELEGIDA


Importante es saber lo que se quiere en la vida: tener un ideal, una meta o propósito, un proyecto de vida.

Hace 55 años, yo tuve bastante claro que mi tarea a desarrollar en la vida, mi “misión” era trabajar-colaborar en la edificación de un Mundo Mejor. Decidí vivir dejándome guiar por este sueño de juventud.


Lo he soñado, lo he buscado, he entregado muchos de mis esfuerzos en ello; pero la tarea (soy consciente) no está acabada.


Y, en esta línea, mi andadura me llevó a participar en diversos proyectos solidarios, incluso pasando unos años en un país del Sur. También a colaborar con diversas ONGs; desarrollar talleres de habilidades sociales,  de auto-empleo, de motivación personal; conducir cursillos de formación; participar o dirigir programas de radio (Interiores, Por un Mundo Mejor, etc.); publicar algunos libros de auto-ayuda (escritos siempre no sólo con las manos, también con el corazón: “Claves de Vida”, “Cambiándonos”, “Grandes Regalos”, “El futuro en mis manos”, “Algo más”, “Te propongo: gozar la vida”, etc.), cuentos con valores (“El lagarto verde y otros cuentos del abuelo”), etc.


A esas alturas de la vida, ahora, bastante más mayor, voy llegando a la conclusión de que, además de hacer…, es importante (tanto o más) llegar a ser: que un Mundo Mejor también se construye “creciendo” como persona, mejorando todo lo posible para llegar a SER quienes hemos de ser.


Y esa es siempre una tarea por alcanzar: llegar a ser mejor persona ¡ese es el gran reto! Toda una tarea para ocupar los días, años, quizá décadas que tengo por delante: evolucionar positivamente como persona, concentrarme en lo verdaderamente esencial, dando sentido a todo lo que hago; trabajar mi paz interior (siendo fiel a mis principios), mejorar mis relaciones personales (estableciendo fuertes lazos de amistad)… Viviendo cada día como un regalo que tengo que aprovechar ¡siendo feliz haciendo felices a las otras personas que me rodean (aunque estén geográficamente lejos)!