FUNDAMENTAL

SER

Existe el riesgo de quedarnos sin ser (precisamente por dejarnos llevar por las “circunstancias” que nos son ajenas).

Decía Ortega y Gasset “Yo soy yo y mis circunstancias” …  pero ¿qué pasa si renuncio a ser YO y sólo soy “las circunstancias”: lo que me dicen o me empujan a ser?

Si la moda, las costumbres, la opinión de otras personas, los programas establecidos (por otras instancias) son lo que me hacen ser cuanto soy… ¿dónde está mi mismidad?

Por ejemplo: si la norma de convivencia “a donde fueres haz lo que vieres”  (dicho que, sin duda tiene mucha verdad razonable) nos hace beber entre los bebedores, fumar entre la gente que suele  fumar, drogarme si estoy entre drogodependientes, tirar basura en medio de la calle y en el campo porque ya hay quienes lo hicieron antes, o gastarme miles de euros en comprarme un “Range Rover” como el vecino u operarme el busto como la modelo y cantante y actriz Christina Aguilera…, porque, si no lo hago pueden decir de mi… que no estoy “en la onda”.

Ser persona es (tiene que ser) otra cosa: SER  es más que una circunstancia, es una cualidad que va unida a la libertad. Y la libertad no es un regalo ni un don que hemos recibido y que podemos perder. La libertad es un logro a conseguir, día a día. Con la verdad (nuestra verdad) por delante.  

Pero… ¡no todo el mundo lo logra!

¿Por qué?, ¿dónde está la dificultad?

Seguramente en que, para SER YO, soy yo quien tengo que mirarme (adentrándome en mi profundo pensar y sentir) para poder “descubrir” TODO lo que hay en mí: cuanto creo y dudo, mis ilusiones vivas y mis sueños rotos, loa proyectos que tengo en mi listado de deseos, los miedos y las desesperanzas que me acorralan… Son luces (fe, esperanza, generosidad, humildad, solidaridad, diligencia…) y son sombras (soberbia, envidia, ira, gula, pereza, lujuria, pasotismo…) que tengo que asumir y arrostrar. Pues se trata de llegar a SER quien, de verdad, SOY.

Sólo así podré SER FELIZ. Me es fundamental.

Y… ¿cómo llevar a cabo este caminar de búsqueda interior?

Habría mucho que hablar de este tema (no es único el camino), pero para iniciar la andadura yo diría: hace falta CREER en mi propia persona y OPTAR por HACER REALIDAD ese plan de búsqueda necesaria que hay que desarrollar, paso a paso, hasta que quede concluido satisfactoriamente.

Si no sabemos cómo hacerlo, no estará de más pedir orientaciones o ayudarnos con la guía de algún libro de ayuda personal.

De todos modos, aquí va mi primera recomendación:

- Tenemos que hacer una lista (sin miedo a que sean muchas las cosas que surjan de nuestra mente; yo, en mi día, encontré más de mil) de RAZONES PARA SER FELIZ.

Quizás que ya este inicial “trabajo” nos vaya dando pistas de qué es lo que hay en nuestro fuero interior y de por dónde han de ir nuestras “metas”…

              Amiga, amigo que me lees:

¿Te interesa?

¿Te atreves?

                                    Pues… ¡ánimo!

Acabo con una cita de Richard Bach en su libro “UNO”:

“Jamás alcanzaremos una vida mejor hasta que seamos capaces de imaginarla por nosotros mismos y nos permitamos vivirla”.

Vivir es hacer el propio camino.